Varias de las distintas etapas que componen una de las rutas más icónica del Camiño de Santiago -el Camino que realizan los peregrinos a la capital gallega, Compostela- han contado con la presencia de un conocido político, tanto a nivel de Galicia como de la España de la que fue presidente del Gobierno. El exmandatario popular Mariano Rajoy, quien ya ha protagonizado alguno de sus clásicos momentos, con su particular forma de expresarse.

Lo cierto es que la imagen del político entrando era una cuestión que los periodistas ya esperaban haber captado ayer lunes, cuando se esperaba que Rajoy entrase en Santiago acompañado de su hermano Enrique, su hijo Juan y de un amigo de éste, con quienes realizó la parte del camino francés, arrancando en la etapa de Sarria (Lugo). 

En este sentido, y como era de esperar, la llegada de Rajoy a Compostela ha estado repleta de comentarios y respuestas del también exlíder del Partido Popular. "En Galicia comemos muy bien", ha proclamado, tras ser preguntado por una gastronomía que ha calificado de "fantástica". En ese contexto, entre peticiones de selfis y otras fotos que le han pedido, ha destacado el caso de una mujer en bicicleta que ha arrancado sonrisas tirando de una de las joyas de la corona del repertorio de Rajoy: "Muchas tardes y buenas gracias".

Unos consejos para futuros peregrinos y media vuelta al ver la cola de la misa

Lo de su mítica frase no ha sido lo único destacable de la llegada a Compostela de Rajoy. En primer lugar, trató de dirigirse a la Misa del Peregrino, pero cuando se percató de la gran cola que había formada, han optado por dar media vuelta y encaminarse a la oficina de acogida al peregrino, donde ha sellado y recibido la compostela -documento que hay que ir sellando por etapas y certifica que se completa una determinada ruta-.

También ha ejercido como consejero de aquellos a los que se iba encontrando y podrían entrar en la categoría de potenciales o futuros peregrinos. "Recomendaría a todo el mundo, político o no, que tenga tiempo y ganas", ha dicho, en su tono habitual, para remarcarles "que se preparen un poco".

Aunque ya había dado pistas de que no le apetecía abordar una actualidad política marcada por el terremoto causado por la publicación del informe de la UCO sobre el 'caso Koldo' que cerca a dos exsecretarios de Organización socialista y al asesor de uno de ellos, los periodistas han tratado de sacarle algo más sobre estas cuestiones sin más  éxito que la confirmación de que está al tanto de todo y que no va a "entrar en detalles".

 "Al apóstol Santiago no le voy a hablar de esos asuntos por los que usted se interesa ni de esas personas a las que usted ha nombrado. No se lo merece", le había dicho hace días a un periodista de 'Al Rojo Vivo', con su habitual retranca.